Soy una farsa

¿Te ha pasado que dudas de poder llegar a tus metas?, ¿te pasa que aplicas a un trabajo y asumes que serás el peor evaluado?, ¿que no das el ancho en algo, o en todo? … te cuento lo que me ha pasado ultimamente…

Soy una farsa, asi me siento muchas veces en la vida. Si bien es cierto que no podemos ser perfectos, todos tenemos una cara que damos al mundo. Una cara profesional, una cara como personas pero a fin de cuentas una imagen pública.

Me sucede mucho que se me acercan alumnos emocionados a preguntar cómo le hice e incluso los más «lindos» que quieren ser «como yo», sin embargo, a pesar de la imagen que ellos tienen de mi yo siento que soy una farsa y que tarde o temprano lo van a descubrir.

Síndrome del impostor

¿Te ha pasado?. No he venido a este artículo a presumir mis logros y sin embargo tengo muchos, pero suelo ver más lo que me falta que lo que he logrado.

A eso súmale que por ser mujer muchas veces las personas te miran como incapaz de programar (desarrollar software) y hay quienes en «secreto», aún expresan que «no son cosas de mujeres», ¿puedes creerlo?

No sé si tengo suerte o mala suerte pero ha sucedido que me prejuzgan como profesionista en el desarrollo por ser mujer, claro que he demostrado que soy capaz pero avivan mi síndrome del impostor. Mi miedo a no ser suficientemente buena.

Y a veces dudo que sea porque soy mujer pero en muchas ocasiones he comprobado que así es, las personas se preguntan muchas veces ¿cómo es posible que una mujer haga algo, lo que sea, mejor que un hombre?. … ¿en serio? en pleno 2023 lo hacen… Me he descubierto a mi misma pensándolo y rectifico.

Por supuesto que mi preparación profesional y mis capacidades me han respaldado pero que duro ser mujer en estos roles aún dominados por hombres, me negaba a creer y pensar que soy juzgada por ser mujer en estos roles pero asi es, así ha sido y seguirá siendo por un tiempo, nos queda mucho que hacer como mujeres.

Te confieso, soy una farsa

En fin, si tu entraste a leer para «descubrir» mis secretos (morbo) disculpa desilusionarte, si entraste aquí porque también te dices constantemente: soy una farsa, no estas solo, seguro somos miles y el único camino que debes seguir es trabajar tu autoconcepto y seguir creando confianza en ti mismo.

Seguramente, como a mi; te cuesta aceptar, asumir y celebrar tus éxitos, lo que te sale bien o consigues. Quizás te reprendas duramente cuando cometes algún error, aunque sea muy pequeño o insignificante. Es posible que restes valor a lo que sabes, a lo que haces, a lo que mereces. Quizá hasta las críticas constructivas te hacen venir abajo. ¿te checa?

¡Bienvenido al club del síndrome del impostor!

Es una experiencia que genera mucha ansiedad, angustia y honestamente desconcentra. Incluso detona crisis existenciales, yo he estado al borde de renunciar a todo, desmotivarme en mi trabajo y de llorar «como una magdalena» porque soy una mujer fuerte pero chillona jaja!.

Me pasa, lo acepto, lo confieso… ya con menos frecuencia pero debo admitir que me complico la existencia sobrepensando, por eso decidí decirlo en voz alta y compartir contigo algunos tips que me ayudan, además de trabajarlo en terapia claro.

Si en este punto tienes duda de si lo padeces checa este test que me sacó de dudas: Test: el síndrome del impostor

¿Cómo supero el síndrome del impostor?

  • Trata de separar tus sentimientos de los hechos, di en voz alta quién eres, ejemplo: tu puesto, tu rol, tu salario…lo que sea que no te creas repitelo cada que dudes para que te lo creas, para que tu cerebro se deje de preocupar un poco por el futuro.
  • Reconoce, como yo ahora, que lo padeces y continua. Hacer consiente lo inconsiente y decirlo en voz alta ayuda a mirarlo con otros ojos y no dejar que te domine.
  • Háblalo con otros que lo padezcan, por ejemplo, déjame un comentario, sería un buen primer paso, no soy psicólogo pero nos sentiremos acompañados.
  • Busca evidencia de tus logros y cada vez que el miedo te quiera dominar, que la preocupación por el futuro entre a tu mente; muestrale evidencias de quién eres y a dónde has llegado. (Debo admitir que esta no la he practicado y no me sale muy bien pero lo intentaré a partir de este momento).
  • Replantea tus pensamientos, he leído que si quieres cambiar un pensamiento debes cambiarlo por otro así que empieza a formular oraciones que no sean: soy una farsa.
  • Otro consejo que dan es que busques un mentor pero básicamente el consejo es que te sigas capacitando en lo que sientes que flaqueas, en tus debilidades personales o profesionales.
  • Celebra tus éxitos, no me sale todavía, la mayor parte del tiempo subestimo cada escalón de mi escalera pero vamos a intentarlo.

Suena fácil seguir los consejos pero seguramente no te van a salir a la primera, culturalmente nos enseñaron a no sobresalir, a no presumir, entre otras cosas. Y si a eso le sumas estar en un rol que comunmente está siendo ocupado por varones, se complica, sin embargo vamos a cambiar, ¿te animas a empezar conmigo? Solo te puedo asegurar que no va a ser fácil y lo tendremos que trabajar a diario, en superar nuestro síndrome del impostor…

Si tienes otro tip, consejo, aventura o porra, déjala en los comentarios que todo suma. Nos leemos pronto 😉

Deja un comentario

A %d blogueros les gusta esto: